Condesa de Ségur, fue una escritora francesa de origen ruso. Sofía Fiódorovna Rostopchina, la Condesa de Ségur, nació el 1 de agosto de 1799 en San Petersburgo, Rusia. Fue hija del conde y ministro de relaciones exteriores del zar Pablo I de Rusia, el conde Rostopchín, cuya familia era originaria de Mongolia. Sus primeros años fueron placenteros y felices, pero esa dicha se rompió cuando Napoleón I invadió Rusia, provocando destrozo y muerte. Se cree que el padre de Sofía fue uno de los principales luchadores contra la invasión de Moscú, a tal punto que estuvo a favor de incendiar la ciudad para evitar dicho dominio. Debido a esa decisión, Napoleón tuvo que emprender una atropellada retirada y Moscú quedó destrozada pero todavía libre. Pero las cosas irían a peor y cuando Pablo I fue reemplazado por su sucesor (Alejandro I), la familia de Sofía debió exiliarse por cuestiones políticas. Allí comenzó una vida de vagabundeo que los llevaría por diversos países: Varsovia, Alemania, Italia y Francia. Sería en este último país donde se quedarían y se convertirían al catolicismo para evitar una nueva persecución. Allí residiría la condesa para siempre y contraería matrimonio con el conde Eugène de Ségur, quien le daría el título por el que hoy se la conoce. La Condesa de Ségur escribió su primera novela a la edad de 58 años. Retirada en su propiedad de Nouettes (cerca de L'Aigle, Orne), en sus libros se nota una clara preocupación por los peligros a los que deben enfrentarse los niños a causa de las malas decisiones de los adultos. Su primer libro publicado, llamado Nuevos cuentos de hadas (1857), tuvo tanto éxito que se animó a una producción constante. Las novelas de la Condesa de Ségur se publicaron entre 1857 y 1871 en la "Bibliothèque rose illustrée" por la casa editorial Hachette, una de las mas importantes del siglo XIX en París, en lo que a literatura juvenil respecta. Tal fue su fama que posteriormente se publicaron colecciones completas de sus obras en múltiples idiomas.
Sus libros más conocidos, además del anterior, fueron: Memorias de un asno (1860), Las desventuras de Sophie (Las desgracias de Sofía) (1859), François, el jorobado (1864), Juan que llora y Juan que ríe (1866), El mesón del ángel custodio (La Posada del Ángel de la Guarda) (1863), Después de la lluvia, el buen tiempo (1871). La Condesa de Ségur falleció el 9 de febrero de 1874, en París; se cree que nunca regresó a Rusia y que, incluso, sintió que Francia era su hogar. Es posible que haya sido esta la razón que la llevó a escribir en este idioma, la lengua de un país en el que se sintió a salvo y protegida. Sus obras fueron reunidas en 1990 bajo el título Œuvres de la comtesse de Ségur.
Las desventuras de Sofía o Las desgracias de Sofía, fue escrito por la Condesa de Ségur en 1859. Narra las aventuras de una niña de cuatro años que, capítulo a capítulo, irá aprendiendo de qué va esto de las apariencias sociales. Sofía es una niña como tantas otras, juguetona, obstinada y rebelde. El ritmo común de la novela se basa en que Sofía cometa alguna travesuras y sera descubierta, encargándose los adultos de decidir el consiguiente castigo, que se traduce en prohibiciones y privaciones varias. Ella, que en el fondo es una niña de gran corazón aunque fuertemente malcriada, pide perdón y modifica su conducta. |