La promulgación de la Constitución liberal de 1857 agudizó los conflictos políticos en el país, al provocar una fuerte reacción de los conservadores, que exigían la desaparición del nuevo código legal restaurador de la república federal, representativa y democrática. Incapaz de gobernar con una Constitución que le parecía demasiado radical, en 1858 el presidente Comonfort la suprimió, renunció a su puesto y lo entregó a Benito Juárez, presidente de la Suprema Corte de Justicia, cargo que equivalía al de vicepresidente. Después de recibir el poder ejecutivo, Juárez salió inmediatamente hacia el Occidente de México; allí instaló su gobierno, formó su gabinete y publicó un manifiesto por el cual restablecía el gobierno constitucional. Comonfort se rindió a los conservadores y salió del país. A su vez, Félix Zuloaga tomó posesión del Palacio Nacional y fue reconocido como presidente por el grupo conservador. De esta manera, la República tenía dos gobiernos; uno conservador en la capital, con Zuloaga como presidente y otro liberal, en provincia, con Juárez al frente del ejecutivo. La guerra civil era entonces inevitable para decidir cuál de los dos grupos habría de regir a la nación. Así empezaría la Guerra de Reforma o de Tres Años (1958 a 1961), lapso en el que coexistieron los dos gobiernos que mantuvieron a México dividido en sendas facciones, cada una de las cuales defendía su ideología e imponía sus leyes y exigencias, propias de un estado de guerra. El gobierno de Zuloaga contaba con la ayuda de la iglesia y el ejército, puesto que defendía los intereses de estas dos poderosas instituciones. Para costear los gastos de guerra, el clero puso a disposición de los conservadores parte de su riqueza y ayudó además con la amenaza de excomunión a quienes siguierón a los liberales. El gobierno de Juárez, en cambio, tuvo que improvisar un ejército con una mayoría de civiles, aunque algunos liberales notables eran militares. La llamada "república itinerante", fue albergada por los estados de Guanajuato, Jalisco y Veracruz. Durante el primer año de la Guerra de Reforma, el Ejército Liberal al mando del general Santos Degollado, intentó tomar la ciudad de México; el 11 de abril de 1859, las fuerzas republicanas al mando del Gral. Santos Degollado, se encontraban en Tacubaya, con instrucciones del gobierno de Benito Juárez de atacar la ciudad para distraer las tropas que sitiaban la ciudades de Veracruz donde se hallaba el gobierno federal, los combates en esta fecha eran muy reñidos y resultaron favorables a los conservadores. |