Luis de la Rosa Oteiza, nació el 23 de mayo de 1805 en el Real y Minas de San Matías, Sierra de Pinos de la intendencia de Zacatecas. Sus estudios en leyes los realizó en el colegio de San Juan Bautista de Guadalajara, ciudad donde participó en la Sociedad Guadalajarense de Amigos del País, que al igual que otras asociaciones de este tipo era un círculo de estudios y de difusión de las tesis económicas liberales y fisiócratas en boga y cuyo fin concreto era elaborar propuestas de reforma para impulsar la actividad económica. A su regreso a Zacatecas fue electo diputado para el Congreso del Estado. Formó parte del grupo de legisladores que respaldaron las medidas de secularización, puestas en marcha por el gobernador Francisco García Salinas. En tal sentido promovió las reformas liberales en favor de la educación, la renovación legislativa y la secularización. A la par de su actividad parlamentaria continuó en el ejercicio privado de su profesión y de los negocios familiares, a los que se dedicó de lleno tras la derrota de las reformas. Tras la separación de Aguascalientes de su estado natal en 1835, participó en la fundación de la Sociedad de Aguascalientes de Amigos del País. En 1842 cambió su domicilio a la ciudad de México con el fin de regresar a las labores legislativas; dos años más tarde, presidió la Comisión de Hacienda en el Congreso General, desde donde frenó las demandas pecuniarias de Antonio López de Santa Anna para atender el conflicto texano. Durante estos años, participó activamente con los grupos liberales de la capital mexicana, tanto con los moderados, particularmente con el general José Joaquín de Herrera, como con los radicales, a lado de Guillermo Prieto. Dos años más tarde, el presidente interino José Joaquín de Herrera invitó a de la Rosa a dirigir la Secretaría de Hacienda. Durante cuatro meses que ocupó el cargo, buscó recursos para sufragar la guerra contra Estados Unidos a través de una iniciativa de ley que no fue aprobada. Paralelamente, buscó arreglar los conflictos con los acreedores de la deuda interna a quienes asignó una renta del 26 % de los recursos aduanales para el pago de los compromisos. No incluyó en este pago a los portadores de bonos en Londres, a quienes propuso un convenio especial. Un mes antes de dejar la Secretaria presentó al Congreso General un proyecto de decreto para solucionar el problema de la deuda pública. Manuel de la Peña y Peñanombró a De la Rosa ministro de Relaciones, cargo que ocupó del 26 de septiembre al 13 de noviembre de 1847, al mismo tiempo que se encargó también de las demás secretarías. En este lapso, Rosas aplazó entablar negociaciones entre los gobiernos de México y Estados Unidos para el arreglo de las diferencias. El 8 de enero de 1848, el presidente Peña y Peña nombró a De la Rosa secretario del Despacho de Relaciones Interiores y Exteriores y asumió nuevamente con resignación las pláticas por la paz con Estados Unidos. Ministro de Relaciones Exteriores e Interiores de la República Mexicana, en el Tratado de Guadalupe Hidalgo del dos de febrero de 1848: Protocolo de las conferencias que previamente a la ratificación y canje del Tratado de Paz, se tuvieron entre los Excmos. Señores don Luis de la Rosa, Ministro de Relaciones Exteriores e Interiores de la República Mexicana, Ambrosio H. Servier y Nathan Clifford, comisionados con rango de Ministros Plenipotenciarios del gobierno de Estados Unidos de América. En ese año, durante los interinatos de los presidentes Manuel de la Peña y Peña y Pedro María Anayaocupó por nueve meses la titularidad de la Secretaría de Hacienda, tiempo durante el cual propuso varias reformas y medidas administrativas. De regreso a su estado ocupó nuevamente una curul en el Congreso local, desde donde presentó una propuesta de reforma. En 1853 apoyó el Plan de Ayutla. El 13 de diciembre de 1855, bajo la presidencia de Ignacio Comonfort, Luis de la Rosa fue nuevamente ministro de Relaciones y le correspondió tender lazos de amistad con muchos países. El 29 de agosto de 1856, Luis de la Rosa renunció al Ministerio aduciendo que padecía una "enfermedad grave". En ese año ocupó la gubernatura de Puebla y posteriormente nombrado Director del Colegio de Minería. A los pocos días de haber sido nombrado Presidente de la Suprema Corte de Justicia fallece en la ciudad de México el 2 de septiembre de 1856. |